miércoles, 30 de diciembre de 2009

Duda

Qué extraño es el sentimiento que me invade esta noche. Será el vino, quizás es el invierno, o acaso la incertidumbre que rodea esta realidad. De tanto pensar en la forma, de tanto meditar el fondo, he olvidado el porqué. No lo sé. Hoy parece que el mundo que habitualmente vive dentro de mi me hubiera abandonado.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Futuro

Esta semana me he dado cuenta de algo raro, tengo un buen rato de no ver el futuro. Se que parece una frase muy bizarra, pero no se de que otra manera expresarlo. De vez en cuando, a veces de manera muy seguida, tengo como dejavus pero de cosas que no han sucedido y luego se confirman en la realidad. Otra vez se que es extraño, pero sucede. Quizás solo sea una ilusión de una mente caótica, y de una imaginación que nunca para, o quizás no. Creo que tengo que leer más a Jung, y por cierto algún día comentar sobre la “sincronicidad” y la “acausalidad”. Que Risa. Bueno debo admitir que es divertido pensar que hay algo más. Por lo pronto extraño esa sensación. (Aclaro, es posible que sean los antigripales los que me hacen alucinar =P)

viernes, 18 de diciembre de 2009

Acerca de la Estupidez

Ayer manejaba en una calle de esta caótica ciudad, cuando un camionetero repentinamente cruzo frente a mí bloqueando el camino. La acción fue tan rápida que me asusto, y luego de ver que no me había chocado reaccione gritándole ¡Estúpido!

Afortunadamente el incidente no paso a mayores, y ya más tranquilo me dejo pensando: ¿A que le llamo yo estupidez?

En principio no creo que sea una simple torpeza del actuar, pues todos en alguna manera y casi diariamente cometemos tonteras, equivocaciones o despistes inconscientes y no por ello pienso que se sea estúpido. Para mí implica algo más.

¿Será que es el sencillo hecho de ejecutar una acción sin considerar sus efectos? Tampoco lo creo, pues igual involucraría que en cada momento estaríamos actuando de manera estúpida, lo cual es igualmente absurdo. De ser así escribir esto sería estúpido pues acepto que no conozco los efectos que tendrá, ni aún en el corto plazo. Entonces puedo decir que (por lo menos para mí) la estupidez no es ignorancia.

Me recordé que leí que esta es la falta de inteligencia, pero ¿acaso eso no es la idiotez? Luego al corroborarlo en el diccionario, este únicamente intercambia los significados, Estupidez = Idiotez. Ahora rio pues sí las palabras (otra vez para mí) fueran intercambiables unas por otras sin diferencia alguna, no valdría la pena dedicarme a estas meditaciones.

Entonces si la estupidez no son los gazapos diarios, no es la ignorancia de los efectos de una acción, e implica a un ser inteligente con la conciencia de estar actuando de dicha manera, la estupidez no es más que la renuncia deliberada de la razón. Es decir tener conocimiento que actuando de cierta manera se va a cometer un daño o violara el derecho de alguien más, saber que existen otras maneras de hacerlo, y a la larga se tendrá un efecto negativo, pero aún así y después de todo insistir en realizar dicha acción. Si me lo preguntan eso es la estupidez para mí.

En retrospectiva quizás el camionetero solo ignoraba mi presencia, tal vez sí le falta inteligencia, o es posible que en verdad haya merecido mi insulto, pero lo importante es que me hizo meditar sobre ello.

Por último, ante todas estas reflexiones me hago otra pregunta, ¿Los políticos que aprobaron el presupuesto deficitario y el paquete fiscal son Idiotas o Estúpidos?

Eso solo ellos lo saben.

martes, 15 de diciembre de 2009

Ladrones

De nuevo veo invadidas las calles de violentos protestantes, que sin el más mínimo respeto por la libertad de los demás impiden que personas que si trabajan y si son productivas no puedan llegar a sus lugares de trabajo. Pero cuando digo productivos no me refiero a que lo sean para el país o el estado, sino para si mismos y sus familias, sin que para ello recurran a quitarle lo que es de otros. Hay muchas personas, afortunadamente la mayoría, que generan riqueza, ya sea creando empleos o efectuando labores necesarias para otros, que son los que en realidad mantienen funcionando la sociedad. Pero por alguna razón hay gente que prefiere quitarles a los demás lo que legítimamente producen, y a esa gente la llamamos ladrones. Pero no hay que encerrarse en la idea que ladrón solo es aquel que se mete por la noche en las casas, o el extorsionista que amenaza desde la cárcel. También los hay aquellos que escudados en causas contradictorias y sin fundamento, buscan beneficios particulares a costa de los demás. Hoy lo que vemos son un grupo de ladrones, que buscan sustraer la propiedad de los demás por uno de los medios más infames: los impuestos. Hoy se atrincheran en las calles exigiendo que se apruebe uno de los más grandes robos que podamos ver en los últimos años, el paquetazo fiscal. Incluso el presidente ha amenazado que de no hacerlo se despediría a muchos trabajadores del estado. ¿Acaso esto no es un robo? ¿Acaso esto no es extorsión?. ¿Acaso esta gente no es lo mismo que aquel marero que pide “impuesto” en la limonada? La respuesta es no, son peores, puesto que estos creen que tienen derecho a hacerlo. Cuando el marero comete sus fechorías sabe (o al menos intuye) que esta violando los derechos de los demás, incluso cuando le matan sabe que lo merece y lo acepta. Pero los políticos, sindicalistas, y todos aquellos que buscan sus intereses a costa de los demás caminan con orgullo y con la arrogancia de unos falaces fundamentos exigiendo lo que creen es suyo, el derecho a robar. Que gente tan depreciable esta.